miércoles, 24 de octubre de 2012

A.....



Es utopía
Que tus brazos arañen el sigilo de mis lágrimas
En horas vacías
Y me desvelen mordiendo la luna en el fondo del océano sideral
Es utopía que cuando leo tu rostro
Leo la aurora de las bellas
Ábrego sin nimiedades
Un encuentro de hadas que trenzan al son de la sonrisa
Un profético yo que aúlla
Que se fue de prisa por el desencuentro
Pero siempre en mis ojos
Te encuentro
Frente al ideal del destino
Siempre tu trino primaveral
Me sacude como tempestad

No es utopía que muerda la almohada
Sin sentirte aquí
No es la almohada
Es la culpa que peregrina en mí
Caída de no darte la profunda entrega
Ese astro que de amor nos riega
Y que hoy por dentro me quema

Como un copo de miel que se derrite en la fragua de lágrimas de abandono
Y por mí
No ofrendo
Mis tímidas caricias a tu cáliz de tamesis
A tu sincera pasión de mimesis
A tu intensa realidad
Y me voy volando como un zorzal
Por entre los rieles de sal de ese pecado
De ese desencuentro
Y en esta embriaguez de sinceridad
Mi olvido
Llora
Las horas del ayer
Llora los racimos de aquel gaudeamus que nos dimos alguna vez
Entre coeternos lazos de trinos, y la barbarie de la risa
Entre las lunas repletas de glicinas de tu piel
Me quede solo
En este jardín de invierno
En esta sed
Esta falta propia
Error de Cirene
Llanto de Eros eterno como la hiel

Me haces falta
Como carcajada de cascadas que inundan de rosa mosqueta mis mañanas
De ese perfumar centinela que es el silbido distante del amor perpetuo
Me hace falta a cantaros tu meseta
Para secar las lágrimas de mí yerro
Para curarte de el mal causado
Y besarte en un ceremonial eterno

Me hace falta el erotismo del ñire y el ciprés y tu boca
Acariciando la sentida sonrisa
Alejándome del glaciar de los silencios

Me hace falta curar la furia del lobo
La sed de los cantaros
Me hace falta decirte te amo
 Y no ser solo un fantasma que deambula por algún renglón de una retama ajena
Perdida en el estero de un atolón olvidado

Me hace falta tu sed
La risa de ese viento feroz
Que me contagiaba taludes de risa eterna

De besos en la nocturnidad
En mi oscuro cuarto de sombras exóticas

Me hace falta el mar por las noches

Remarte toda
Desnudarte
Y hacer el amor en el agreste telar del silencio
Y desatar su furia
Hacia la empinada urbe de mundanos olvidos
Para poblarlas de versos
De poesía
Y no de canoas repletas de descuido….

Me haces falta
Como el último grito de nuestra odisea
No me vencen ni náyades, ni sirenas
Ni mujeres vacías repletas de esperma aciago
Solo tus suspiros
Solo tu cuerpo inundado
Tu cuerpo que gime un amor puro
Eterno
Callado
Encallado en las mareas de un soliloquio tierno
Que cuando desata su salvajismo
Impregna la luna de canto
Me haces falta
Por que tus brazos son un acordeón de nardos enamorados
Que abrazan la lira de los espejos
A estoicos y a griegos
Tu belleza interior deja mudos y ciegos
Me hace falta acuciarme en la trova de tu sonrisa
Ya que como Erató
Tu boca solo conoce lírica
No prisas


Y quiero que sepas que amar
Es el lamento de puma
Que puebla la espesura del silencio
Con el arrabal de la gracia
Y caza noche y día
La eterna pulsión de la luna
El recodo más profundo de la sinceridad
Y de la comprensión en esta espesura absurda que se llama realidad
Drenaje de corchetes y danzas vacías , infinitos y  olvidos
De pura mentira de pantano
De toda la sobra de vocabulario




Penetro lumbreras de brisas
Para ir con prisa
A la escarcha de mi estupidez y derretirla con el penitente amor que siento
Y no miento
Centurias pasan a través de un dedal de hado, sino, y locura
Pero el amor, el amor que siento
Todo cura

No es una encrucijada es un acierto
Eterno

Como los besos que braman cuando no te siento
Arrullan todas las noches  como gatos heridos
Pero no hago otra cosa que amarte
Solitario como el velamen de mis versos
Que te llaman
Que te quieren volver a bañar la boca
Eternamente en el acorde de un beso

En la triste despedida de la ultima gota de lluvia
Dejo este poema zurcido con las piras de un corazón perdido
Pero bajo sus llantos
Florece el secreto rizoma del amor verdadero
Que no conoce tiempo
Que no conoce distancia
Que no conoce olvido
Que no conoce la mentira
Por que son falacias de un dios idílico
Que se llama trueno del absurdo
El amor es lo que calma
Las voces del río
Ese que conocemos
Y tememos
Por que cuando los que amamos nos miramos
Vemos que como su hermano tiempo
Nos duerme en las extensiones de una vid ajena
Pero podemos vencernos
Amando
Con el alma en el viento
Éxodo de las barbaries de aljabas repletas
Podemos amarnos mas allá del horizonte de los tapujos
Eternamente
Puramente
Ciegamente
Enamorados de la vida
Los valores y el tiempo
Ese que no se marchita
Por que vive en la sonrisa
Esa eterna que cuando expresa el respirar de tu bosque
Inunda a los magos con la savia del sentir
Y quiero sentir
Que estas
Que no te vas
Por que muerdo la luna
Pero también el alquitrán de la oscura despedida
Me despido de la vida
Si no me amas


Retruécano en la piel del vacante ardiendo


Entre truenos, trinos y relámpagos
Nuestras manos se encendían
La civilización maullaba un estribillo del más íntimo apetito
Mis manos vanidosas en tu boca
Pernearon la serenidad del instante
Tome tus labios
Los empuje hacia la borrasca
Y nuestras bocas desencadenadas
Brindaron el conspicuo concierto
Tus piernas se abrieron lentamente
Y de esos parpados de Afrodita
El eterno himeneo.
El amor que perenne grita
Musitando arrullos de mar que crepita
En el rompiente de tu voz
En la cascada del más súbito deseo.


De Claudio R a Claudia






 La metrópolis de la belleza…anida en tus labios embrujos de la eternidad

                                                           A Claudia

He sobrevivido

A la persecución del tiempo

A sus quimeras que coquetean

Un tártaro tremendo

Que escapa en legañas de hiel

De culpa.


He sobrevivido a la cordura

Que buena es cuando no dura

Por que me permite la mimesis sináptica de mi dulzura

Siempre al margen de la locura.

Siempre entregándome al néctar del silencio

De el aprendo

De el me aferro

En esta hora vana

Donde la miel mundana

Sorda se mata en fantasmas.

He sobrevivido

Al océano de la duda

La he vencido

Con tus labios


Que todavía no me besan

Pero

Que en su refugio

Anida la sed

Y la esperanza de este imperio

El de los besos



He sobrevivido en esta vida

Al mi exilio

A mi aullido final

En la escollera del destino.

Sigo sobreviviendo

En una canoa que navega por los pentagramas de tus cielos

Coreando una patoja

Algún destello

Algún espejismo de mi nada

De mis delirios

Y me pierdo en las corcheas, en los acordes deliciosos de tus fragantes alas

Y sobrevivo

Eternamente

En el silbido del bosque

En la ira de la montaña

En el retruécano del arroyo

En la luz

Que en la oscuridad del tiempo

Me ilumina.
Y siempre me acompaña.

He sobrevivido al recuerdo

A esta añoranza

A estos ensayos ciegos

De danza vagabunda

De estío

¿Sobreviviré a tus besos?

lunes, 22 de octubre de 2012

Tamiz de Herencia





Tamiz

Que truena en las cadencias del alma trémula,

Tamiz

Que recorre el silbido inmortal del amor,

Así es la libertad.

Donde quede al fragor,

Del abrazo de la intensidad

Donde no hay dolor, solo sinceridad.


Herencia, que es si no la libertad, pensar, sentir, caminar en un hilván de nubes de pasado, para nadar en la persistencia de una canción, una cueca o un destello de esos besos ecuestres, que anidan en la mas bella fragancia de lo eterno.

Tu boca cabalga junto a la mía, en ese río intimo que es el ayer, que son las ansias de los astros por heredar, la mas bella música, la melodía del sentir, la satisfacción del hacer, el eco del soñar, como quererte y no mujer.

La poesía es un sueño, pero un sueño del otro, del que nos sueña despierto, y el poeta es un luchador inquebrantable, un granito de sal que pelea contra el océano de las mentiras, un océano que derrite a los débiles, y flaquea la sinceridad de los fuertes, pero el poeta, trasciende, mas allá del nombre mas allá del apellido, heredar la pluma de los infinitos, es poetizar la trova eterna del regreso, la trova de los sueños…
Nunca dejen de soñar

Nunca deben que el arrope del silencio, venza.

Todos somos silencio, sinceridad, pero coraje, poesía y humanidad.

Todos mujeres, y hombres, niños y adultos, podemos escribir un verso mágico, un magistral destello de realidad, un verdadero himno para sobrevivir al siglo que se desmorona, para sobrevivir a la mezquindad de las distopias.

Yo soy humilde, solo se amar, solo se que es lo bueno de la vida, y es llorar.

Llorar no es debilidad, es prudencia.

Por la esperanza que nos espera ya.

viernes, 11 de mayo de 2012

Fortuna amar

los dados esconden las miradas
el conocimiento se alborota en sus latitudes
como el amor
juega a las escondidas en los ardores del aire
los dados ruedan como eternas hiedras por ciudades
asediadas por las quietudes y las heridas
pero se frenan en las caricias de la mirada
miel antojo de los dioses
de los hombres ante el acantilado del olvido
los dados de la sabiduria evaden simbolos y penas
pero las observan como transeuntes nomades
como portadores de ese oasis que es loa interior
los dados son palomas que avanzan con el color
y nos dejan con cada movimiento un nuevo cromatismo
una nueva sed y esencia
una nueva raiz en el viento
en el tropel del narajno floreciente
a los dados los agitan cefiros que parecen iluminar el interior
como candiles en la noche de baviera
como el eco de Odilon Redon
pasteles y musicalidades producen sus pasos por el territorio de la soledad
y la impregnan de lo nuestro
la esencia bailarina,
agora de cristal
los dados cruzan las llanuras del ocaso
y lo hacen brillar
como estrellas polares
como furia ritual
adormecido voy siguiendo los pasos de ese azar
de esa hojarasca que se me va,
se me va la vida
en la mirada perdida
en el cabalagar de la soledad
pero espero algun dia
encontrar los dados que perdi en la lugubre sinceridad
espero algun dia poderte besar
a ti mujer
que se donde estas
pues no soy el que esta
soy el otro
que descanza en el arrabal de la cabala solitaria
del sentir oblicuo
incongnosible petalo de luna
al despertar
espero algun dia poderte soñar
como aquella vez bajo el trino del bandoneon,
bajo las cuerdas del enamoramiento
y la brillante tempestad del amor...
espero esperarte y que esperes
ese sentir
que el viento trae
que el viento lleva
y trasnforma en flor
lo que nos da el verdadero amor
el no olvidar

Sirenas ( Bosqejo de un verso de mar, un petalo del sol que naufraga en la eterna soledad)




El tiempo escapa
es arena que se desliza al colofón de las simetrías
Al borde del piélago
A la sazón
Polifemo gimotea
Y de su bucólico rugido
El reino celestial acude
Y todo se confunde
Navíos y pertinacias se borran
Perplejos quedan los hombres de mar
Como quien da un primer beso
Como quien corre
A la lisura de la belleza
Al instante eterno.
Justo cuando las lágrimas agitan crisantemos
Las sirenas cantan
Tu llanto yelmo.
Poesia de R.Hood Claudio Romero
Linaje de espera (el amor, aguarda, contempla los templos del deseo, nos hace temblar, y un gimoteo, despierta el aullido de la euforia, de un te amo, que se quiere gritar , hasta las raíces del sol)

Tu boca
Esculpida por el sueño
Tallada con el néctar de los siglos
Calca las escapadas del amor
Las tertulias por mi boca
Las caricias del horizonte de los versos
Tu boca
Paraíso que escapa a los obstáculos del tiempo
Tu boca me hace amar
Tu boca es
Lo que la sed no explica
Lo que el tiempo esconde
Lo que la mía susurra
Pues es bálsamo del mar
De los trinos de caballo
De la voz al eclipsar
Tu boca
Es crisantemo en flamas
Que no me deja olvidar
Lo bello que es amar